miércoles, julio 27, 2005

Más que simple necesidad

Cuando las cosas marchan en un camino que parece tener solo una dirección a la felicidad, te encuentras con el hecho de que no podrás estar en manos y en los cuidados de alguien que te hace feliz.

De eso parte la necesidad, ahí reconoces tu sencillez y lo complejo de tus lazos con ese alguien, a pocas horas de sentirte lejos sientes una gran necesidad. Los brazos vacíos y las palabras que se quedan sin ser escuchadas. Deseos de haber dicho lo correcto y de haber dado el mejor recuerdo para esa ausencia. Pero de esos momentos lejos, conoces la gran parte de ti que basa tus momentos en las sonrisas y en las tristezas que se comparten.

El necesitar a alguien por no sentirte solo suena absurdo, pero cuando tus sentimientos te hacen sentir en la soledad, sin esa persona que los comparte contigo, rápidamente deja de ser absurdo.