“Relato de un abrazo”
Es la historia de la creación de lo más hermoso en este mundo. Y comienza así…
Una noche Dios estaba sentado sobre las nubes del paraíso, pensando y maquinando al mundo que gira a sus pies. Para de repente tener una idea increíble. Dios decidió escribir el poema mas hermoso que ha existido y que podrá existir. Lo que simples humanos sueñan en lograr, Dios decidió hacerlo realidad. De esa forma Dios tomo la nube más blanca y la extendió en un lienzo perfecto, después tomo trozos de carbón negro de los sueños de la humanidad y comenzó a escribir su gran obra.
Aun Dios con su magnifica omnipotencia sintió que era una tarea difícil, dedico días y noches enteras a plasmar en palabras hermosas y frases sabias lo que nadie mas podría lograr. Así trabajo incansables noches sin descanso, hasta que por fin una noche fría miro su lienzo terminado y puso punto final.
Dios no estaba satisfecho con su obra, comenzó a leerla y se dio cuenta que en sus manos se encontraba un hermoso tesoro, pero aun no tenia un titulo. Se detuvo y pensó por muchos días más en ese nombre que representaría tan hermoso trabajo.
Al final de muchas noches, agotado de pensar encontró el titulo perfecto, rápidamente se postro ante su obra, con mano firme y decidida tomo el último trozo de carbón y escribió “Lucia”
No es una historia común, no es algo que alguien pueda inventar si no es por una buena razón para creerla.
Una noche Dios estaba sentado sobre las nubes del paraíso, pensando y maquinando al mundo que gira a sus pies. Para de repente tener una idea increíble. Dios decidió escribir el poema mas hermoso que ha existido y que podrá existir. Lo que simples humanos sueñan en lograr, Dios decidió hacerlo realidad. De esa forma Dios tomo la nube más blanca y la extendió en un lienzo perfecto, después tomo trozos de carbón negro de los sueños de la humanidad y comenzó a escribir su gran obra.
Aun Dios con su magnifica omnipotencia sintió que era una tarea difícil, dedico días y noches enteras a plasmar en palabras hermosas y frases sabias lo que nadie mas podría lograr. Así trabajo incansables noches sin descanso, hasta que por fin una noche fría miro su lienzo terminado y puso punto final.
Dios no estaba satisfecho con su obra, comenzó a leerla y se dio cuenta que en sus manos se encontraba un hermoso tesoro, pero aun no tenia un titulo. Se detuvo y pensó por muchos días más en ese nombre que representaría tan hermoso trabajo.
Al final de muchas noches, agotado de pensar encontró el titulo perfecto, rápidamente se postro ante su obra, con mano firme y decidida tomo el último trozo de carbón y escribió “Lucia”
No es una historia común, no es algo que alguien pueda inventar si no es por una buena razón para creerla.
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